Aisha Kandisha

La otra noche tuve un sueño. En él me encontraba ofreciéndole una recepción al embajador de algún país exótico. Yo, monísimo de la muerte, con un chaqué que estilizaba mi figura, ya de por sí esbelta. Le guiño el ojo al mayordomo que se dirije hacia mí con una bandeja repleta de los famosos bombones, en alusión a que le ofrezca al embajador uno de ellos, cuando de repente me devuelve el guiño y comienza a sacudir la cabeza señalando al del turbante. Yo no entiendo nada, y en éstas que con paso presuroso se me planta delante, me da una colleja y me dice : ¿Pero tú eres tonto o qué, qué te crees, la Preysler? Anda y pasa la bandeja ahora mismo o te vas al paro y sin indemnización....ARGGG!!! YO ERA EL CAMARERO!!!..... Y entonces desperté.

El sueño, unido al dulce de membrillo que hice el otro día me dieron la idea de hacer estos bombones de membrillo, facilísimos y riquísimos. En el País Vasco es un postre típico el membrillo con nueces, acompañado de helado de queso Idiazabal. Simplemente os dejo ahí la propuesta. Eso sí, la bandeja con ellos os la va a pasar Rita la Cantaora.

INGREDIENTES:

Dulce de membrillo. Podéis ver la receta AQUÍ.
Nueces.

PREPARACIÓN:

Trituramos las nueces y las disponemos en un plato.
Con la ayuda de dos cucharillas, formamos bolitas con el membrillo y las rebozamos en las nueces.

Al igual que la Preyler, espero haberos conquistado con ésta receta realmente.....jajaja.

¿Encanna?

Mira bonita, que tengo dos membrillos haciendo la mili en Ceuta, y digo, pos voy a llamá a Empanadilla, no vaya a ser que me se queme Encanna....jajaja

Y es que la receta de hoy venía a huevo para rendir homenaje a estos dos monstruos que tan buenos momentos nos han hecho pasar. Sin duda el mejor sketch de humor que he visto hasta el momento y que, aunque supongo todos habréis visto más de una vez, habrá gente joven o de otros países que no lo conozcan. Así que aquí os dejo éste video de Martes y Trece parodiando el programa "Encarna de noche".

Lo que está dando de sí el membrillo. Y es que creo que voy a declarar, como los famosos grandes almacenes, LA SEMANA FANTÁSTICA o los 8 DIAS DE ORO del membrillo. En Andalucía son muy típicas éstas empanadillas rellenas de cabello de ángel, pero como aquí no se tira ná y me sobró membrillo por un tubo, pues ala, empanadillas de membrillo, que además, están exquisitas.

Para la masa he utilizado la de mis ROSCOS FRITOS, y que podéis ver AQUÍ. No obstante y para los más perezosos, os la transcribo nuevamente:

INGREDIENTES:

PARA LA MASA:

4 huevos
200 grs. de azúcar
30 ml. de anis dulce
1/2 vaso de zumo de naranja
80 ml. de aceite de oliva virgen extra (AOVE)
60 ml. de leche
800 grs. harina de reposteria
1 sobre de levadura de reposteria.
Aceite de girasol para freir las empanadillas.
Azúcar glass para decorar.

PARA EL RELLENO:

Dulce de membrillo. Receta AQUÍ.

PREPARACIÓN:

Batimos los huevos con el azúcar en un bol grande.
Agregamos la leche, el aceite, el zumo de naranja y el anís.
Cuando esté todo incorporado vamos añadiendo la harina con la levadura y vamos amasando hasta conseguir una masa blanda que se despegue de las manos.
Dejamos reposar la masa dentro del bol tapado con un paño o un film durante unos 30 minutos. (Podeis realizar éste proceso con la panificadora, programa masa, y amasais hasta que veáis que la masa se despega de las paredes. Llegado ese punto, desconectamos la panificadora y dejamos reposar la masa 30 minutos).
Vamos cogiendo porciones de masa, amasamos con un rodillo hasta dejarlas bien planas. Rellenamos con una cucharadita de dulce de membrillo y cerramos las mismas, apretando los bordes con un tenedor para que no se salga el relleno.
Freimos en abundante aceite a temperatura media, para que se nos hagan bien por dentro y no se quemen por fuera.
Sacamos y dejamos enfriar, espolvoreándolas una vez frias con azúcar glass.

Hoy, al hilo de éstas tortillitas de bacalao tan ricas y tan típicas de ésta tierra, quiero hacer un homenaje al habla típica andaluza, y aunque yo no lo soy de nacimiento, sí lo soy de adopción y me siento andaluz como el que más, por lo que os quiero dejar un manifiesto en defensa de ésta lengua tan rica (y cachonda).

"Hoy estoy guarnío. Y lo que más me gusta de estar guarnío es poder decir que estoy guarnío... Es una expresión que me encanta... como tantas otras que son tan nuestras. Como cuando uno se harta de comer y acaba engollipao o cuando riegas las macetas más de la cuenta y las dejas enguachinnás... Yo nunca pido churros, sino calentitos... de niño nunca iba a las atracciones, sino a los cacharritos...a los amigos pesados se les dice jartibles y cuando me tangaba del colegio lo que hacía era rabona... (qué peyas ni peyas). A lo largo de mi vida he conocido a más apollardaos que tontos y a más esnortaos que despistados... pero nunca a ningún antipático, sólo a malajes o saboríos... Aquí lo mucho es una jartá o una pechá, y lo poco es una mijita... y la gente no pasea, da vuertas... Lo que está muy sucio está empercochao y lo que limpias a fondo lo dejas escamondao... Si se te va la olla te quedas majarón, y si das mucho la lata te llaman pejiguera... Los borrachos, que son papaos, no deambulan, sino que dan camballás... y la gente no odia la mentira, sino el falserío... Lo roto está descuajeringao y lo pasado de fecha revenío... los cobardes son jiñaos y lo muy visto está mu manío... Por expresiones como estas, y las miles que se quedan en el tintero, cada vez me gusta más el andalú... y quien diga que hablamos mal que aprenda a entendernos y verá como le coge el gusto... buenos días.. (y que conste que lo que acabo de soltar no es ninguna tontería, sino una chuminá)".

NO NI NÁ - tres negaciones para una afirmación rotunda.

INGREDIENTES:

300 grs. de bacalao en su punto de sal. (Mercadona)
100 grs. de harina de trigo.
100 grs. de harina de garbanzos.
300 ml. de agua templada.
1 cebolleta.
2 cucharaditas de perejil picado.
Unas hebras de azafrán.
Aceite de Oliva Virgen Extra para freir las tortillitas.

PREPARACIÓN:

Picamos finamente el bacalao y la cebolleta.
En un bol, mezclamos las dos harinas y vamos añadiendo el agua, mezclando hasta que quede una masa homogénea.
Añadimos a la masa el bacalao, la cebolleta, el perejil y las hebras de azafrán.
Ponemos el aceite a calentar en una sartén y cuando esté caliente, vamos vertiendo cucharadas de la masa y formando las tortillitas, dándoles la vuelta cuando estén doraditas.

Y ahora tengo que deciros que estoy pletórico porque he resultado ganador del sorteo ANCHA CASTILLA organizado por MANU (COCINANDO CON CATMAN), asi que quiero agradecerselo como es debido:

Como diría Almodóvar: Ai uan tu zenk tu Manu de cat, tu mai famili an tu ol mai favorit saints. Zank iu tu de virgin of Guadalupe, tu de virgin of La Cabeza, tu de miraculus har of Maria, San Judas Tadeo, and Yisus of Medinaceli. Zen kiu tu ol of yu.

Para aquellos a los que se os atraganta el inglés, os lo traduzco: Quiero agradecer a Manu Catman, a mi familia y a mis santos favoritos. Gracias a la Virgen de Guadalupe, a la Virgen de La Cabeza, al milagroso corazón de María, San Judas Tadeo y Jesús de Medinaceli. Gracias a todos.

Esta claro que lo mío son las lenguas, las malas lenguas...jajaja.

Los "VISITANDINES" son pequeños pastelitos que preparaban las hermanas de la Orden de la Visitación de Santa María (Francia) y que posteriormente fueron adaptados por los suizos dándoles forma rectángular y convirtiéndolos en los hoy conocidísimos "FINANCIERS".

Otros atribuyen el origen de los "financiers" a un pastelero francés que los hizo populares en el distrito financiero de París para que sus clientes, financieros ellos, pudieran comerlos de una manera fácil y sin mancharse las manos.

Sea como fuere, yo he querido traeros éste dulce tan poco conocido, con una textura parecida al bizcocho, ligero y húmedo y que por lo general contiene almendras trituradas o aroma de almendras. Yo he sumado ambas cosas y a las almendras molidas he añadido esencia de almendra amarga, resultando unos dulces increiblemente delicados, con sabor a "Amaretto", pero con la ventaja de no contener alcohol.

INGREDIENTES: (para 12 visitandines aproximadamente)

120 grs. de mantequilla.
120 grs. de azúcar.
60 grs. de harina de repostería
60 grs. de almendras molidas.
1 ampolla de esencia de almendras amargas. (*)
120 grs. de claras de huevo.

(*) La esencia de almendra amarga viene en una ampolla de 2 ml. En Lidl la venden en un envase que contiene diferentes esencias.

PREPARACIÓN:

Comenzamos fundiendo la mantequilla en el microondas.
A continuación añadimos el azúcar, la harina y la almendra molida y mezclamos bien con unas barillas.
Añadimos la esencia y las claras de huevo y batimos hasta conseguir una mezcla con cuerpo, con textura casi de punto de nieve.
Vertemos la masa en los moldes elegidos y llevamos al horno precalentado a 210º durante unos 15 minutos o hasta que estén doraditas.

Una receta de las de toda la vida. Aquí en Andalucía es muy típica, podeis encontrarla como tapa en la mayoría de los bares y cuya preparación no tiene nada de particular, los ingredientes son simples y lo que puede variar es la forma de cocinarla. Yo os voy a contar, por ser vos quien sois, mi manera de prepararla.

En casa somos ¿un poco? particulares y las carnes nos gustan muy blanditas y aunque a lo mejor invierto más tiempo en prepararla, de esta manera me garantizo que la carne está que se deshace. Para ello utilizo la olla GM, pero igualmente podriamos hacerla en olla superrapida o de manera tradicional.

INGREDIENTES:

500 grs. de magro o estofado de cerdo
3 dientes de ajo
1/2 vaso de vino fino
1/2 vaso de agua
1 hoja de laurel
1 bote de tomate natural triturado (Yo utilizo de la marca "Martinete")
1 rodaja de pimiento rojo, una cucharada de azúcar y otra cucharada de perejil picado
Sal, pimienta blanca y Aceite de Oliva Virgen Extra

PREPARACIÓN:
1. En un fondo de AOVE en la cubeta de la olla GM doramos la carne. Una vez dorada vertemos el fino, el agua y la hojita de laurel y programamos menú CARNES hasta que pite.
2. Una vez terminado, despresurizamos y reservamos la carne sin el líquido de la cocción.
3. Sin enjuagar la cubeta, vertemos en ella el contenido de la lata de tomate, los dientes de ajo, la rodaja de pimiento rojo, 2 cucharadas de AOVE, sal, el perejil picado y el azúcar y programamos menú GUISADO.
4. Cuanto termine el programa despresurizamos y trituramos la salsa de tomate y volvemos a verter en la cubeta el tomate frito ya triturado junto con la carne y programamos menú ARROZ hasta que termine.
Aunque aparentemente es un poco más laborioso, pero la carne sale muy blandita y sabrosa.

Qué envidia me dan esas tartas que corren por la red fantásticamente decoradas, yo en esas lides soy más borrico, pero vamos, que también me gustan esas tartas cubiertas de forma irregular como si las hubiera repellado "Manolo y Benito". Con esto estoy demostrando tener menos criterio que el capitán de la serie "El barco"...¿no?

Y es que mira que dí vueltas por vuestros blogs intentando decidirme por alguna para un acontecimiento tan especial como fué el cumpleaños de mi mujer (que no os digo la edad porque me corre a gorrazos, menuda es ella), así que lancé un S.O.S. a TERE (LOS POSTRES DE TERESA) que para mí, es toda una institución en ésto de la repostería y me recomendó entre otras, su tarta SUPREMA DE CHOCOLATE Y ALMENDRAS. Mientras tanto el torbellino de THERMO (OLOR A HIERBABUENA) quien me recomendó también unas tartas estupendas, resulta que también tenía en su haber la misma tarta de Tere y entonces, ni me lo pensé, esa era mi tarta, con alguna que otra modificación debido a los gustos de la "hojameneada" como diría mi amiga Lola.

Con ella quiero felicitar también a mi alumna aventajada, ANY, que el próximo sábado día 15 también cumple años, tampoco digo cifras porque ésta sí que me tira la zapatilla a la cabeza.

INGREDIENTES:

PARA EL BIZCOCHO:

1 yogurt natural sin azúcar.
3 huevos.
2 medidas (el mismo vaso del yogurt) de azúcar.
3 medidas de harina de repostería.
1 sobre de levadura Royal.
1 pizca de sal
1 medida de aceite de girasol.
2 ml. de esencia de naranja. (1 ampolla de Lidl.)

PARA EL ALMÍBAR:

100 ml. de agua.
100 grs. de azúcar.
20 ml. de ron blanco.

PARA EL GANACHÉ DE CHOCOLATE FONDANT:

300 grs. de chocolate fondant (70% cacao)
250 grs. de nata para montar (35.1% MG o similar)

PARA LA GLASA DE CHOCOLATE:

115 grs. de cacao sin azúcar.
90 grs. de mantequilla.
500 grs. de azúcar glass.
1.5 dl. de leche.

PARA DECORAR:

Láminas de chocolate (Lidl)

PREPARACIÓN:

Preparamos en primer lugar el GANACHÉ de chocolate y para ello, fundimos al baño maría el chocolate. Mientras tanto, ponemos al fuego la nata y cuando comience a hervir, vertemos sobre el chocolate y mezclamos con una cuchara de madera hasta que quede una crema homogénea. Tapamos con un film y guardamos en el frigorífico hasta la hora de usarla.
A continuación metemos mano al BIZCOCHO, batiendo con unas barillas en un bol los huevos y el azucar. A continuación añadimos el yogurt, la esencia de naranja y el aceite y seguimos batiendo. Incorporamos la harina tamizada junto con la levadura y la sal e integramos con movimientos envolventes. Vertemos la masa en un molde engrasado e introducimos al horno precalentado a 180º durante 45-50 minutos o hasta que al pinchar la aguja salga limpia. Dejamos enfriar y desmoldamos.
Turno de la GLASA. Para ello batimos la mantequilla en un bol hasta obtener una crema. Tamizamos el azúcar glass y le vamos incorporando la mantequilla poco a poco. Al principio lo hice con una varilla manual y una vez incorporada toda el azúcar, con una batidora eléctrica de varillas lo integré todo perfectamente a baja velocidad. Incorporamos el cacao tamizado y la leche de forma gradual hasta obtener la textura deseada.
Ponemos los ingredientes del ALMÍBAR en un cazo al fuego y lo dejamos hervir durante 5 minutos. Reservamos.
Y ahora nos toca montar la tarta y para ello abrimos el bizcocho por la mitad. Calamos las dos partes del bizcocho con el almíbar, bien con una brocha o con un pulverizador y de forma generosa. Disponemos sobre la parte de abajo la cantidad de ganaché de chocolate que consideremos oportuna y tapamos con la parte superior del bizcocho (al que previamente le he quitado la corteza y lo he dejado recto). Cubrimos con la glasa de chocolate toda la tarta, de manera tosca con una espátula y la cubrimos con las láminas de chocolate.

Es un poco laboriosa pero francamente merece la pena. Está buenísima

Llevo practicamente toda mi vida tratando con el público. Y me encanta. Tengo que reconocer que se me dan bien las relaciones sociales y atesoro en mi memoria una cantidad ingente de anécdotas. Desde bien pequeño ya estaba detrás de un mostrador. Mis padres tenían una tienda de comestibles, una de esas tiendas de barrio con clientela fija. Este es mi homenaje a una de esas clientas, Mariquilla "la del peo".

Lo más desgraciaito que parió madre. ¿Que por qué Mariquilla "la del peo"? porque según ella, debido a una ventosidad tuvieron que cogerle dos puntos....a saber...jajaja. En otra ocasión pasó el día entero en la playa y la ingresaron con quemaduras de 2º grado.

Pues bien, un día llegó con esa gracia innata y me dijo: Niño, dame unas nutillas pa mi nieta. ¿Nutillas?, serán natillas, ¿no María?. Que no niño, NU-TI-LLAS de chocolate, de eso que se "junta" en el pan. Ah, NOCILLA María, NO-CI-LLA, pues eso NUTELLA....jajaja. Era única, Dios la tenga en su gloria.

El Estonien Kringle es el equivalente nórdico a nuestro roscón de Reyes. De aspecto impactante y superficie estriada, puede parecer laborioso, pero su elaboración es bien sencilla, sólo hay que seguir los pasos que podéis ver pinchando AQUI. Admite todo tipo de relleno, aunque el original lo era de uvas pasas y almendras, pero podéis hacerlo relleno crema de canela, frutos secos o como en éste caso, de Nutella.

Con él participo en el concurso de recetas navideñas del blog "SWEET & SOUR", que estos días celebra su primer cumpleblog con éste fantástico concurso.

Fuente: Directo Al Paladar.

INGREDIENTES:

PARA LA MASA:

30 grs. de azúcar glass.
120 grs. de leche templada.
30 grs. de mantequilla a temperatura ambiente.
300 grs. de harina de fuerza.
15 grs. de levadura fresca de panadería.
1 yema de huevo.
1 pizca de sal.

PARA EL RELLENO:

Nutella a discreción.

PARA EL GLASEADO:

50 grs. de azúcar glass.
20 grs. de clara de huevo.

ELABORACIÓN:

AMASADO EN PANIFICADORA:

Yo he utilizado la panificadora para la masa y me ha resultado de lo más fácil y sencillo, para ello he vertido en la cubeta la leche templada, la yema de huevo, la mantequilla, continuando con el azúcar glass, la harina, la pizca de sal y la levadura.
Conectamos el programa AMASAR y dejamos hasta que termine. Ya estará lista para preparar el kringle.

AMASADO MODO TRADICIONAL:

En un bol mezclamos el azúcar glass, la leche tibia, donde habremos disuelto la levadura, y la mantequilla y mezclamos bien con unas varillas eléctricas.
Añadimos la yema de huevo ligeramente batida y seguimos batiendo hasta que obtengamos una mezcla homogénea.
En otro bol, tamizamos la harina con la pizca de sal y añadimos la mezcla realizada anteriormente y amasamos.
Sacamos la masa y la disponemos en una superficie enharinada y seguimos amasando hasta obtener una masa lisa y homogenea.
Hacemos una bola y la dejamos reposar en un bol tapado durante una hora aproximadamente.

DAMOS FORMA AL KRINGLE:

Una vez ha doblado su volumen, sacamos y extendemos la masa con un rodillo hasta formar un rectángulo. Podéis ver el paso a paso AQUÍ.
Disponemos encima de la masa el relleno elegido y enrrollamos a lo largo.
Practicamos un corte de manera longitudinal sin llegar hasta el final, dejando unos dos centímetros de masa sin cortar y vamos trenzando nuestro Kringle, dejando la parte estriada hacia arriba y cerramos los extremos, sellándolos con un poco de agua.
Introducimos en el horno precalentado 180º durante unos 20-25 minutos, dependiendo del horno.
Sacamos e inmediatamente pincelamos la superficie con la glasa que habremos hecho batiendo con un tenedor el azúcar glass junto con la clara de huevo.

SIMPLEMENTE ESPECTACULAR.

8º DESAFÍO EN LA COCINA y hoy tocan BOMBONES.

No quería hacer unos bombones al uso y me rompí la cabeza pensando "¿cómo me las maravillaría yo?".

La respuesta llegó en forma de éstos bombones de chocolate con leche rellenos de Nutella y con un toque de sal.

Hay ocasiones en las que te planteas si realmente merece la pena hacer en casa determinadas recetas. Nunca se me pasó por la cabeza hacer bombones, podemos encontrar en el mercado cientos de ellos y a un precio asequible, pero tengo que deciros que el tiempo (más que el esfuerzo) merece la pena. Éstos en concreto resultan una mezcla de texturas y sabores increibles, crujientes por fuera pero con la cremosidad interna de la Nutella y el toque de sal que potencia el sabor de los chocolates. Toda una auténtica delicia.

Además, las sales que he utilizado son diferentes sales gourmet, algunas en escamas y otras en formato cristal.

La Sal Taj Mahal, que aporta un toque de especias de la india y da un sabor especiado al bombón, o bien la Sal Rosa del Himalaya, de sabor muy suave. Una auténtica joya es la Sal Azul de Persia, característica por su color y que confiere al bombón un sabor muy sútil. La Flor de Sal con Pétalos de Rosa es una maravilla, confiere matices de frescura y un atractivo olor. Los Diamantes de Sal Mediterránea compuesta por orégano, romero, tomillo y hierba de limón aporta una frescura y un sabor indescriptible.

INGREDIENTES:

1 bolsa de Candy Melts sabor chocolate con leche.
Nutella.
Distintos tipos de sal:

Sal Taj Mahal.
Sal Rosa del Himalaya.
Sal Azúl de Persia.
Sal Mediterránea.
Sal Pétalos de Rosa.

PREPARACIÓN:

Fundimos el contenido de la bolsa de Candy Melts en el microondas siguiendo las instrucciones de la misma.
Vertemos el contenido en los huecos del molde elegido.
Golepamos el molde suave y repetidamente contra la encimera para que el chocolate penetre bien en los moldes y se eliminen las posibles burbujas de aire que se puedan formar (veremos cómo éstas afloran a la superficie.)
Con una espátula o un cuchillo eliminamos el exceso de chocolate e introducimos en el frigorífico.
Pasados unos minutos (nunca más de 5, ya que se solidificará el chocolate en exceso), sacamos el molde y lo colocamos boca abajo sobre un bol para eliminar el chocolate de la parte central de los huecos del molde y que todavía no se ha solidificado, con el fin de formar los vasitos de chocolate.
Rellenamos hasta la mitad los vasitos con Nutella bien con una manga pastelera o con una cucharita. Podemos calentarla en el microondas si está muy solidificada. Volvemos a introducir en el frigorífico ésta vez unos 10 minutos aproximadamente, hasta que la Nutella se endurezca un poco.
Sacamos el molde del frigorífico, volvemos a derretir los candy melts en el microondas y cubrimos la Nutella con ellos. Con esto conseguimos formar una tapa crujiente de manera que nos quede el bombón compuesto por un vaso de chocolate crujiente y un relleno de Nutella cremoso. Y antes de que solidifique disponemos una pizca de la sal elegida en la superficie.
Dejamos solidificar y listos para degustarlos. Los conservaremos como cualquier otro bombón.

Con esta receta me despido hasta después de las fiestas, necesito descansar y desconectar, pero no me voy sin antes expresaros mis mejores deseos para éste año que entra. Cómo me gustaría tener una varita mágica y con ella poder solucionar todos y cada uno de los problemas de todos y cada uno de los que me habéis confiado los vuestros; familiares, amigos, compañer@s bloguer@s, gente anónima que sin conocerme absolutamente de nada han compartido conmigo sus historias, sus enfermedades, propias o de seres queridos, sus divorcios, sus despidos, sus depresiones, sus deshacios, simplemente buscando palabras de ánimo y apoyo. No he podido hacer más que eso, escuchar, y me llevo lo mejor de vosotros, no lo dudéis, pero no todo ha sido negativo, si bien es cierto que me habeis hecho llorar, sufrir, reir, he pasado muy buenos momentos, habéis aguantado estoicamente mis chorradas y tonterías, mis consejos, mis comentarios, mis anécdotas, pero eso sí, contadas desde el corazón, con todo el cariño, y por todo ello quiero daros las GRACIAS, así, gritando y deseando que el 2013 os traiga lo mejor (a pesar del numerito). MUCHÍSIMAS FELICIDADES y hasta pronto.

Vuelta a la rutina. No os miento si os digo que no he echado de menos en absoluto el blog, sí a tod@s vosotr@s. Necesitaba estos días de descanso, de desconexión, dedicarle más tiempo a mi familia y sobre todo a mí. Así que vengo como nuevo, eso es por lo menos lo que opina mi vecina, que no digo nombre, porque, como diría ella, quiero mantenerla en el más estricto "economato". Me la encontré hace un par de días y me comentó: "uy, qué guapo te veo, ESTÁS MÁS GORDITO". Ya me remató la condená. Sí, es cierto (pensé), habré cogido un par de kilos estas fiestas, que multiplicados por 10 son los mismos que te sobran a tí, jodía!!! (No os preocupeis, mi vida no corre peligro porque me he asegurado de que no me lee...jajaja)

Comienzo el año practicamente como lo terminé, con un Kringle Estonian, uno de los responsables directos de estos kilos de más, y es que estas navidades los he hecho como churros. Han sido objeto de consumo interno, se han convertido en regalo para amigos y familiares y han supuesto un éxito rotundo, así que el Kringle, unido a otro de los descubrimientos que he hecho en éstas fiestas, la crema de turrón, han dado como resultado éste fabuloso dulce que animo a que probéis, ya que lejos de lo que pueda parecer, su elaboración es de lo más sencilla.

INGREDIENTES:

PARA LA MASA:

30 grs. de azúcar glass.
120 grs. de leche templada.
30 grs. de mantequilla a temperatura ambiente.
300 grs. de harina de fuerza.
15 grs. de levadura fresca de panadería.
1 yema de huevo.
1 pizca de sal.

PARA EL RELLENO:

Crema de turrón (Mercadona)
Almendra crocanti picada.

PARA EL GLASEADO:

50 grs. de azúcar glass.
20 grs. de clara de huevo.

ELABORACIÓN:

AMASADO EN PANIFICADORA:

Yo he utilizado la panificadora para la masa y me ha resultado de lo más fácil y sencillo, para ello he vertido en la cubeta la leche templada, la yema de huevo, la mantequilla, continuando con el azúcar glass, la harina, la pizca de sal y la levadura.
Conectamos el programa AMASAR y dejamos hasta que termine. Ya estará lista para preparar el kringle.

AMASADO MODO TRADICIONAL:

En un bol mezclamos el azúcar glass, la leche tibia, donde habremos disuelto la levadura, y la mantequilla y mezclamos bien con unas varillas eléctricas.
Añadimos la yema de huevo ligeramente batida y seguimos batiendo hasta que obtengamos una mezcla homogénea.
En otro bol, tamizamos la harina con la pizca de sal y añadimos la mezcla realizada anteriormente y amasamos.
Sacamos la masa y la disponemos en una superficie enharinada y seguimos amasando hasta obtener una masa lisa y homogenea.
Hacemos una bola y la dejamos reposar en un bol tapado durante una hora aproximadamente.

DAMOS FORMA AL KRINGLE:

Una vez ha doblado su volumen, sacamos y extendemos la masa con un rodillo hasta formar un rectángulo. Podéis ver el paso a paso AQUÍ.
Disponemos encima de la masa el relleno y enrrollamos a lo largo.
Practicamos un corte de manera longitudinal sin llegar hasta el final, dejando unos dos centímetros de masa sin cortar y vamos trenzando nuestro Kringle, dejando la parte estriada hacia arriba y cerramos los extremos, sellándolos con un poco de agua.
Dejamos reposar el Kringle 1 hora antes de hornearlo.
Introducimos en el horno precalentado 180º durante unos 20-25 minutos, dependiendo del horno.
Sacamos e inmediatamente y con una cuchara regamos la superficie con la glasa que habremos hecho batiendo con un tenedor el azúcar glass junto con la clara de huevo.

Ay qué pena más grande, qué dolor!!!! Lo veis ahí, con ese colorcito tan estupendo que parece que ha estado tomando el sol en Torremolinos, PERO ESTÁ MUERTO Y ASAO!!!!, y mira que se lo dije, QUE ESO NO ES UNA LÁMPARA DE RAYOS UVA, QUE ES MI NUEVO HORNO DE CONVECCIÓN!!! Y ni caso. Lo último que me dijo fué que le untara aceite, que él con un poquito de aceite por el cuerpo y un limón metío en el culo era feliz. Dicho y hecho y mientras él terminó con ese aspecto tan estupendo, yo aquí con un color peo-mona que ni os cuento. Estoy por meter la cabeza en el horno y no sacarla hasta que no salga como King Africa.

Con ésta receta estreno uno de mis nuevos juguetes que me han traído éste año los Reyes Magos, "porque he sido muy bueno", según dicen. Pues me podían haber traído un bono para un SPA los mu mamones. Pero bueno, no nos quejemos que gracias a ello hemos podido catar éste pollo tan delicioso.

Tenía muchas ganas de hacerme con éste "cacharro". Había oído y leído infinidad de comentarios respecto al Horno de Convección y espero a través de futuras entradas poderos comentar de manera objetiva cuales son sus ventajas y sus inconvenientes.

Para comenzar, contaros que éste horno permite asar a la parrilla, al grill, freír, cocer, hervir y preparar comidas al vapor. Funciona por medio de aire caliente que circula por todo el horno, por lo que permite cocinar los alimentos de manera homogénea, con lo que resultan más tiernos y jugosos. Además, permite cocinar sin añadir grasas adicionales, permitiendo "freir" con el simple hecho de pulverizar los alimentos con aceite. Aparte es muy fácil de limpiar y no genera humos ni olores.

En principio suena perfecto y para los asados sí puedo decir que va fenomenal y éste pollo es buena prueba de ello.

INGREDIENTES:

1 pollo entero mediano (unos 2 kgs. aproximadamente).
2 cucharadas de especias para pollo asado. (Yo usé especias compradas a granell pero venden sobrecitos al efecto)
1 pastilla de caldo de pollo.
1 limón partido por la mitad.
Aceite de Oliva Virgen Extra.
1 vaso de vino blanco.

PREPARACIÓN:

En un bol mezclamos las especias, la pastilla de caldo, el aceite y el zumo de medio limón, batiéndolo bien todo.
Se mete dentro del pollo varias cucharadas de éste preparado junto con el medio limón restante.
Pincelamos el pollo con el resto de la mezcla e introducimos en el Horno previamente precalentado a 250º. (Yo puse una tartera cerámica para recoger los jugos del pollo y así no ensuciar demasiado el recipiente del horno y el pollo encima de la rejilla baja). Regamos con el vaso de vino blanco.
Colocamos el aro extensor en el horno y programamos 50 minutos a 200º, dándole la vuelta a mitad de cocción para que se vaya dorando de manera uniforme.
Pasado el tiempo, quitamos el aro extensor y programamos 10 minutos más a 225º por cada lado para que se termine de dorar.

El susodicho metío en el OVNI. Qué vidorra!!!

Ya tenía yo ganas de meterle mano a EMILIA, (COUSAS DE MILIA), bueno, a una de sus recetas, que después vienen los malos entendidos...jajaja.

Y es que su blog está lleno de recetas que me tienen enamorado (excepto las que llevan palitos de cangrejo). Me encantan las galletas y en más de una ocasión he comentado mi debilidad por la repostería especiada, así que no he podido resistirme a éstas galletas de azúcar, canela y clavo, así que Emilia, tú ve echándole guindas al pavo que yo le echaré a la pava, azúcar, canela y clavo...jajaja.

INGREDIENTES:

150 grs. de mantequilla.
180 grs. de azúcar.
2 huevos tamaño "L"
1 cucharada de leche. (Usé el medidor de la panificadora)
1 y 1/2 cucharadita de levadura de repostería.
1 cucharadita de canela.
1/2 cucharadita de clavo molido.
350 grs. de harina.
1 pizca de sal.

ELABORACIÓN:

Batimos en un bol la mantequilla con el azúcar hasta que cojan volumen.
Añadimos los huevos, la leche, la canela y el clavo y seguimos batiendo.
Incorporamos la harina tamizada junto con la levadura y la sal e integramos con movimientos envolventes.
Introducimos la masa en una manga pastelera y vamos formando las galletas sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal, dejando cierta distancia entre las mismas porque en el horno crecen un poco.
Introducimos al horno precalentado a 175º durante 12-15 minutos.

Esta es mi particular versión de un pan que marcó mi infancia, y digo particular porque en el fondo los ingredientes que he utilizado no tienen nada que ver con los auténticos, ya que éste está hecho con harina y sémola de trigo en lugar de harina y sémola de cebada que son los ingredientes originales de ésta hogaza de pan marroquí.

Este pan es conocido como "KHOBZ", aunque también podemos encontrarlo como PAN CRONE. Es un pan muy popular en Marruecos y lo consumen tanto endulzado con miel, mermelada o mantequilla, así como de acompañamiento a platos salados como los tajines. Como digo, está hecho a base de harina y sémola de cebada que son muy utilizadas en Marruecos, mucho más incluso que la sémola de cuscús, ya que ésta última es menos digestiva.

9º DESAFIO EN LA COCINA y como habréis comprobado, va de PAN. Una propuesta efectuada por mi queridísima MARIBEL PEÑAS (A NADIE LE AMARGA UN DULCE) a la que agradezco éste reto que ha hecho reencontrarme con mis orígenes. Si queréis ver el resto de recetas elaboradas por mis compañeros de reto, sólo teneis que pinchar AQUÍ.

Normalmente utilizo la panificadora para amasar, me facilita muchísimo la labor, pero ésta vez he querido amasar a mano, tal y como lo hacen en Marruecos porque he querido ir comprobando a medida que amasaba, la textura de la masa. Además, no es un pan que necesite amasar demasiado, ni tampoco requiere mucho tiempo de levado, por lo que puede estar hecho desde que empezamos a amasar hasta que lo sacamos del horno, en una hora y media.

INGREDIENTES:

1/2 Kg. de harina de trigo de fuerza.
1/2 litro de agua más o menos.
1 cucharadita y media de sal.
25 grs. de levadura fresca.
Semola fina o semolina de trigo.

ELABORACIÓN:

En un cuenco amplio mezclamos la harina junto con la levadura y la sal
Vamos vertiendo agua, siempre templada, sobre la mezcla, poco a poco y vamos amasando. Recomiendo amasar con una mano y con la otra ir echando el agua hasta conseguir una masa consistente (yo no necesité toda el agua) Amasamos durante unos cinco minutos.
Volcamos la masa sobre la mesa de trabajo y seguimos amasando durante 5 minutos más.
Damos forma de bola a la masa y la tapamos con un paño de algodón durante 20 minutos.
Durante éste tiempo habrá levado lo justo para seguir amasando, y lo hacemos añadiendo un pelín más de agua templada durante unos 5 o 10 minutos.
Con ésta masa os da para hacer un par de tortas de unos 35 cms. de diámetro (como en mi caso) o bien una torta grande, por lo que o bien dividimos la masa en dos y formamos dos bolas o bien formamos una sola bola. En cualquier caso, dejamos reposar unos 5 minutos más.
Pasado el tiempo, espolvoreamos la superficie de trabajo con semolina y harina y formamos la/s torta/s.
Las introducimos en el horno precalentado a 250º durante unos 5 minutos, al cabo de los cuales bajamos la temperatura a 230ª y dejamos cocer hasta sin tiempo, hasta que veamos que está dorada por fuera (unos 15-20 minutos aproximadamente)

Hoy no tengo ganas de ná, estoy más flojo que un muelle guita. Según el glosario andalú de palabras habladas, pronunciaciones y su origen, "un muelle guita" es un muelle que se hace con guita (cuerda) y que resulta tan lacio y tan flojo que no sirve pa ná. (También aplicable a otras partes del cuerpo.)

La pereza es la madre de todos los vicios, y como madre hay que respetarla. Pero cuando la cena depende de uno, no hay más remedio que sacudírsela de encima y sacar fuerzas de donde no las hay, porque si no, las fieras se me echan encima y francamente, estoy pa que me devoren, pero no de ésta manera....jajaja.

Tenía los ingredientes, tenía mi thermomix (rescatada al efecto del baúl de los recuerdos) y tenía la receta desde hacía algún tiempo. Es una receta muy fácil de hacer y resulta un plato muy vistoso, sabroso y apto para todos los públicos. Las fieras resultaron saciadas....pero yo no: Ay ven, devórame otra vez, devórame otra vez, que la boca me sabe a tu cuerpo, desesperan mis ganas por tí.....(Fuente: Azúcar Moreno)

Fuente de la receta: La Juani de Ana Sevilla.

INGREDIENTES:

250 grs. de jamón cocido en lonchas.
250 grs. de queso en lonchas. (El que prefiráis)
60 grs. de cebolla.
100 grs. de leche.
30 grs. de mantequilla o Aceite de Oliva Virgen Extra.
200 grs. de nata para cocinar.
10 tortitas mejicanas de maiz (Mercadona)
180 grs. de queso rallado. (Mezcla de 4 quesos)
Queso Philadelphia.
1 pizca de nuez moscada.

PREPARACIÓN EN THERMOMIX:

Picamos el jamón y el queso vertiendo las lonchas enteras en el vaso y programamos 12 segundos, velocidad 3. Reservamos.
Sin lavar el vaso, añadimos la cebolla, la trituramos a velocidad 5 unos segundos, bajamos los restos y añadimos la mantequilla o el aceite y sofreimos unos 7 minutos, temperatura varoma, velocidad 1.
Agregamos la nata, la leche y la nuez moscada y programamos 5 minutos, temperatura 100, velocidad 3.
Añadimos el jamón y el queso que teníamos reservados y 100 grs. del queso rallado (mezcla de 4 quesos) y mezclamos 10 segundos, velocidad 3, dejando templar un poco para que tome consistencia.
En una fuente para horno engrasada con aceite, vamos colocando una tortita y dos cucharadas soperas del relleno, y así sucesivamente, alternando tortita y relleno, terminando con una tortita.
Cubrimos la superficie y los bordes con queso Philadelphia y espolvoreamos con el resto del queso rallado.
Gratinamos unos minutos y servimos.

Y ahora quiero agradecer a mi querida EMILIA (COUSAS DE MILIA) que haya pensado en mí para concederme el PREMIO LITERARIO 2013, porque a mí, al igual que a ella, me apasiona la lectura e intento sacar tiempo de donde no lo tengo para poder sumergirme en ellos y evadirme. Me encanta meterme en el personaje (sobre todo en el de Grey...jajaja) y hacer mía la historia. Siempre he sido mu peliculero, qué le vamos a hacer.

Tengo que citar al menos dos libros que me haya gustado leer a lo largo del 2012. Han sido muchos y sería muy complicado elegir cuales me han gustado más, así que voy a citar los tres últimos que he leído y que son:

1.- DEFENDER A JACOB, de William Landay, una novela de suspense psicológico y drama familiar por la que merece la pena dejarse atrapar.

2.- LA CENA, de Herman Koch, una novela inquietante que no deja indiferente, donde al final, todo se vuelve del revés y lo que era blanco, termina convirtiéndose en negro. Totalmente recomendable.

3.- EL LECTOR DE CADÁVERES, de Antonio Garrido, un thriller histórico ambientado en la China medieval, donde la ambición y el odio caminan de la mano del amor y la muerte.

También he de citar dos libros que me gustaría leer a lo largo de éste año, y en ésto no me voy a complicar la vida, porque quiero leer la TRILOGIA "CENTURY" de Ken Follet, de la que hasta ahora sólo hay publicados dos libros, LA CAIDA DE LOS GIGANTES y EL INVIERNO DEL MUNDO.

Agradecer también de todo corazón a ESTELA Y PILAR (COCINANDO CON ESTELA Y PILAR) la concesión del premio LIEBSTER AWARD, a quienes auguro un futuro brillante. Muchas gracias chicas.

Parafraseando a mi amiga Lola: "HOY FOLLO......

CON FATATAS.....jajaja".

Algunos ya lo sabéis, pero para los que no, contaros que soy el anfitrión del mes de febrero del RECETARIO MAÑOSO, un blog dedicado a dar a conocer productos típicos de Aragón y mostrar su uso en recetas de toda índole. Elegí como ingrediente del mes el vino Somontano. Son vinos que muestran unas características únicas, como una buena graduación alcohólica, una notable frutosidad y un nivel adecuado de acidez.

El vino elegido para ésta receta es un Somontano blanco, variedad Chardonnay, con un intenso aroma a manzana verde, melocotón, guayaba, fruta de la pasión e hinojo. Espectacular al paladar y que confiere a éste plato un aroma y gusto exquisito.

Fuente: TOMATES VERDES FRITOS.

INGREDIENTES:

6 muslos de pollo.
2 dientes de ajo.
200 ml. de vino Chardonnay.
200 ml. de salsa de soja.
1 cucharada de aceite de oliva virgen extra.
Sal y pimienta.

PREPARACIÓN:

Salpimentamos los muslos de pollo previamente engrasados con aceite y los disponemos en una fuente para horno.
Prensamos los dientes de ajo y los disponemos en un bol junto con el vino y la salsa de soja, mezclándolos bien.
Echamos la mezcla sobre los muslos de pollo e introducimos éstos al horno precalentado 180º durante unos 50-60 minutos aproximadamente, dándoles la vuelta de vez en cuando.

Niñoooo, NIÑOOOOOO!!! Qué coraje más grande me dá que me llamen "niño". Me vuelvo y me encuentro a la última persona que desearía encontrarme: LA MANOLI. Qué cosa más pesá. Por supuesto, yo no pierdo mi sonrisa profiden (más falsa que Judas y que deja al descubierto mi nada desdeñable caja de dientes). ¿Qué pasa Manoli? Ay, qué contenta estoy, que mi Yeni se ha colocao en el Carrefú de patinadora, porque como tu sabes, mi Yeni patina divinamente. Lo de divinamente sobraba, porque la Yeni, a la que practicamente he visto crecer, no ha destacado nunca por sus habilidades físicas. Cuánto me alegro Manoli, pero es que tengo prisa, a ver si me acerco por Carrefour y veo a la Yeni....

Y me acerqué, porque como soy tan novelero, quería hacer YA un bizcocho con mi nueva olla GM, la Cocimix de Luxe, una auténtica maravilla pero mi frigorífico estaba como la boca del marido de la Manoli, vacío. Me planto en Carrefour y cuando llego, me encuentro con que ahora se llama Carrefour Planet. Qué cosa más bonita, más bien montá y qué moderno chikillo, me quedé extasiao mirando el techo cuando veo pasar una sombra. ¿Es un pájaro? ¿un avión? NOOO, es la Yeni patinando que se acerca hacia mí a la velocidad del rayo. Me planta dos besos y la chiquiilla me cuenta que está contentísima. Pero yo la miro y la remiro y le veo algo raro, hasta que me doy cuenta que tiene los labios como dos morcillas de Burgos. ¿Yeni, tu te has puesto silicona en los labios, mi alma?. No, qué va, que me he estrellao contra el expositó de los vinos....pobrecita mía...(continuará...)

Y es que la cosa no queda ahí, pero no quiero aburriros con mis historietas, ahora vamos al bizcocho de marras, que como podeis ver en las fotos, quedó perfecto (he de decir que a mí me gustan los bizcochos más blanquitos, pero aún así, estaba pa morirse). He comenzado con un bizcocho básico, el típico de yogurt (de limón). Comodísimo y el resultado buenísimo, sólo un "pero", la cara superior queda con aspecto de estar crudo pero no es así, de todas maneras, siempre tenemos la opción, como hice, de dar la vuelta al bizcocho y hornearlo unos minutos más.

Un bizcocho muy blandito, ideal pa la Yeni y su padre, que los pobres no están pa mucho masticar....jajaja.

INGREDIENTES:

1 yogurt de limón.
3 huevos.
2 medidas (el mismo vaso del yogurt) de azúcar.
3 medidas de harina de repostería.
1 sobre de levadura Royal.
1 pizca de sal
1 medida de aceite de girasol.

PREPARACIÓN:

En un bol, batimos con unas barillas los huevos y el azucar hasta que queden cremosos.
Añadimos el yogurt, y el aceite y seguimos batiendo.
Incorporamos la harina tamizada junto con la levadura y la sal e integramos con movimientos envolventes.
Forramos la base de la cubeta con papel vegetal engrasado (yo hice un círculo tomando como plantilla la base de la cubeta), con ésto evitamos que el bizcocho se tueste demasiado por la base y vertemos la masa.
Programamos el menú horno a 140º durante 35 minutos.
Abrimos la olla y damos la vuelta al bizcocho para que se dore la parte superior, y programamos nuevamente menú horno, 140º durante 3 minutos más.
Desmoldamos y decoramos al gusto.

Los huevos estrellados son a "Casa Lucio" lo que las patatas con tomate a "Casa Esteban".

El restaurante "Casa Esteban" es un auténtico museo gastronómico y taurino, con una decoración muy peculiar, a base de antiguedades, aperos de labranza, cabezas de toro, rifles, pero sobre todo destaca por sus exquisitas especialidades en cocina tradicional. Una de ellas es este plato de "papas con tomate y huevo" que me he permitido el lujo de versionar.

"Casa Esteban" se encuentra en el centro de la localidad sevillana de Tomares, muy cerquita del Carrefour donde trabaja la Yeni, y de la que estoy obligado a contaros el final de su historia como patinadora del Carrefú. Pues dias después me encontré con su madre, la Manoli, la cual tremendamente apesadumbrada y compungida me cuenta que: "A MI YENI LA HAN DEVALUAO (anda coño, pensé, como al Euro) y ahora trabaja como reponedora y yo tengo un disgusto tan grande que me sa cerrao el estómago y no me entra ná." (pensé que se estaba de broma, porque de su brazo colgaba una bolsa con una barra de pan a la que no paraba de dar pellizcos, en fin, serían los nervios). Me enteré que el altercado contra el expositor de vinos no fué el único, que había arrollado a un azafata que ofrecia "actimeles naturales azucarados", la cual resultó contusionada en la cabeza por la caída de un objeto contundente, UN BOTE DE COLACAO. Y es que hay gente que nace con estrella y otros estrellaos, literalmente.

Esta receta no deja de ser un plato de patatas con tomate, pero quiero aprovechar para contaros cómo están hechas éstas en concreto, y para lo que he utilizado la ya mencionada olla GM (COCIMIX DE LUXE) con la que hice el BIZCOCHO que os presenté en la entrada anterior. No hace falta decir que podéis elaborarla de manera tradicional, pero ésta es una forma muy cómoda y sana de hacerlas porque las patatas salen entre cocidas y al horno, reduciendo enormemente las grasas que tendrían si se hubieran frito de manera convencional.

"MI TESORO" en diversas fases de funcionamiento

INGREDIENTES (PARA 4 PERSONAS):

1 Kg. de patatas.
1 lata de tomate natural triturado de 1 kg.
3 dientes de ajo.
1 rodaja de pimiento rojo.
2 tomates deshidratados (le da un sabor fantástico a la salsa de tomate)
Perejil picado.
Sal.
4 huevos.
Aceite de Oliva Virgen Extra.

PREPARACIÓN:

Comenzamos preparando la salsa de tomate, para ello vertemos un chorreón de Aceite de Oliva Virgen extra en la cubeta de la olla y a continuación el tomate natural triturado, los dientes de ajo pelados, la rodaja de pimiento, los dos tomatitos deshidratados y una cucharada de perejil picadito y sal.
Cerramos la olla y programamos menú guiso 20 minutos.
Cuando termine el programa, destapamos la olla, vertemos la salsa en una olla y la trituramos. Reservamos.
Limpiamos la cubeta y añadimos a la misma las patatas cortadas al gusto, en mi caso como para tortilla, le añadimos un poco de sal y un chorrito de aceite de oliva. Removemos para que se impregnen con el aceite y programamos menú horno, 160º, 10 minutos.
Sacamos las patatas y las vertemos en la salsa de tomate reservada.
Freimos un huevo por comensal y emplatamos al gusto.

Mira que son bonitos los cake pops, estéticamente fantásticos, pero me voy a cagar en la leche que mamaron....

Y es que me dieron el día los muy jodíos. No, no os voy a meter el miedo en el cuerpo porque la verdad es que son muy fáciles, aunque necesitan su tiempo de elaboración y su dosis de paciencia, PERO UNA Y NO MÁS, SANTO TOMÁS....jajaja, o quizás sí, pero cuando se me pase el cabreo.

Como era la primera vez utilicé un bizcocho que aunque "casero" como denominaba la etiqueta, era industrial, y como frosting, queso mascarpone. No os voy a poner cantidades porque los hice a ojo, y fuí mezclando el bizcocho con el queso hasta conseguir la textura que consideré oportuna, por lo que los primeros que hice no tenian gran consistencia y acabaron rompiéndose, pero al final, les cogí el truco. Vamos con los puñeteros.

INGREDIENTES:

Bizcocho (cualquier tipo os vale)
Queso mascarpone.
Palitos para cake-pops.

PARA DECORAR:

Cobertura de chocolate (Lidl)
Cobertura de vainilla (Lidl)
Virutas, bolitas de anis y otras decoraciones de azúcar para adornar (Lidl).

PREPARACIÓN:

En un bol, desmigamos el bizcocho y vamos vertiendo cucharadas de queso mascarpone hasta que obtengamos una masa moldeable y consistente. Le damos forma redonda y las vamos depositando en una bandeja.
Introducimos las bolas de bizcocho en el frigorifico por un tiempo mínimo de 3 horas para que se endurezcan.
Pasado ese tiempo las sacamos y preparamos la cobertura de chocolate (la mía venía en bolsitas para calentar directamente en el microondas) y si no, lo derretimos al baño maría.
Mojamos un extremo del palito en el chocolate y lo clavamos hasta la mitad de nuestras bolitas de bizcocho.
Volvemos a introducir en el frigorífico hasta que el palito se adhiera totalmente a la masa. (Yo las tuve 1 hora).
Retomamos nuestra cobertura de chocolate y vainilla en éste caso y vamos cogiendo los cake-pops y bañándolos en la misma, dando golpecitos para escurrir el exceso de cobertura y no nos gotee.
Antes de que la cobertura solidifique, vamos decorando cada cake-pop con virutas de chocolate, los anises o el adorno que prefirais.
Conforme lo vayamos decorando, lo vamos pinchando en un corcho (hay soportes exclusivamente para cake-pops) dejando secar la cobertura. Recomiendo no meterlos en el frigo porque la cobertura se nos puede resquebrajar y arruinarnos la jornada. Entonces ya es pa hacerse el Arakiri directamente.

Hoy no teneis ningún derecho a quejaros porque la receta que os traigo es tan fácil que es capaz de hacerla hasta mi mujer...

No creáis que corro peligro de recibir una colleja por decir ésto, la pobre mía es consciente de sus limitaciones, pero una cosa es tener limitaciones y la otra es ser nula para la cocina. Ayyy!!! ¿pero porqué me pegas si es verdad?...Desde luego, no hay quien os entienda. Lo que he podido comprobar es que las verdades duelen..... Y MUCHO....Ayyyy!!!

Fuente: Los Fogones de Luisa.

INGREDIENTES:

1 paquete de obleas para empanadillas.
500 grs. de patata.
3 huevos.
Bacon.
Queso rallado (usé Cheddar y Gouda).
Sal.

PREPARACIÓN:

Comenzamos cortando las patatas como para tortilla, las colocamos en un bol con un chorreón de aceite y sal. Removemos y las llevamos al microondas, a máxima potencia durante 10 minutos. Sacamos y removemos. Comprobamos que están hechas y si no fuera así, volvemos a meterlas un par de minutos más o hasta comprobar que están tiernas. Reservamos.
Batimos los huevos con una pizca de sal y añadimos las patatas que teniamos reservadas.
Sobre una bandeja de horno disponemos las obleas en moldes de papel para magdalenas y vamos rellenando con la mezcla de huevo y patata.
Cubrimos con la mezcla de los quesos rallados y le añadimos bacon cortado a tiras.
Llevamos al horno precalentado a 180º durante 20-25 minutos o hasta que estén doraditas.

Después de la tanda de collejas que me llevé en la entrada anterior, he decidido, para ganar puntos, celebrar San Valentín, pero que conste que no lo he hecho nunca. Mi queridísima lleva toda la semana dándome la lata con San Valentín, dale que te pego: "He soñado que me regalabas un collar de perlas para San Valentín". De perlas nada menos!!! Pos va lista. Pero ella insiste: "Oye, que esto no es ninguna indirecta, que lo he soñado de verdad". Sí mujer, lo que tu digas... (¿lo estoy arreglando verdad?)

Pero, ¿la voy a dejar sin regalo, pobrecita mia?, de eso nada. Y es que tan pesá se ha puesto con lo del sueñecito que al final he acabado cediendo y comprándole un regalito, el libro "LA INTERPRETACIÓN DE LOS SUEÑOS"....jajaja. Si veis que no vuelvo a publicar, por favor, llamad a la Policia.....aunque creo que no va a hacer falta, porque ella sabe que es lo más bonito y lo que más quiero en este mundo y que no me hace falta un día como el de hoy para demostrarle cuánto la quiero. (¿Ha colao, cariño?)

Y para celebrar San Valentín, os traigo una receta más antigua que el propio Santo en cuestión, porque es el primer pan conocido a lo largo de la historia. Se elabora sin levadura y se hace mezclando simplemente harina de algún cereal con agua y sal (opcional). Otros tipos de panes sin levadura son los roti indios, las tortillas mejicanas, las piadinas italianas, las arepas venezolanas y las hostias.....sí, sí, las hostias que se emplean en las eucaristías son una especie de pan ácimo.

Estos en concreto son muy parecidos al pan de pita, pero su corteza es tan extremadamente fina que llega a ser translucida y supercrujiente (llegan a recordarme a las tortas "Ines Rosales" pero saladas) por lo que resultan deliciosos con cualquier relleno.

INGREDIENTES:

500 grs. de harina de fuerza.
10 grs. de sal.
250 ml. de agua.
20 ml. de leche (para pintar los panecillos).

PREPARACIÓN:

Mezclamos la harina y la sal y vamos incorporando poco a poco el agua, trabajando la mezcla unos minutos.
Hacemos una bola y la dejamos reposar durante una hora.
Pasado ese tiempo, la extendemos con el rodillo, dejandola muy fina, con un grosor de unos 3mm.
Con un cortapasta redondo vamos cortando las piezas y colocándolas en una bandeja de horno. Yo también, corté algunas con forma de corazón, como véis (una tontería como otra cualquiera).
Pincelamos cada panecillo con leche y lo introducimos al horno precalentado a 210º durante unos 6 minutos aproximadamente.

Hoy me paseo por aquí de la mano de tres damas de la cocina. Por un lado, de mi querida LOLA "SALADOS Y POSTRES " y de CHARY "MI COCINA Y OTRAS COSAS" que han organizado un concurso simultáneo, CONCURSO DE NARANJA (LOLA) y CONCURSO DE LIMÓN (CHARY).

El concurso está patrocinado por LA FRUTA EN CASA, que proporcionará al ganador/a un lote de 15 kgs. de productos cítricos, así que no teneis excusa para no participar.

Lola, cariño, hoy te pongo los "cuennos" con la Chary, porque con éstos bocaditos participo en su concurso de limón. Pero no me saques las uñas, que ya estoy manos a la obra preparando algo para tí.

Y al otro lado del ring, una de mis musas, mi siempre admirada y elegante MARY "CUCHILLITO Y TENEDOR", a quien vilmente le he birlado la receta que hoy os presento, así que si por un casual resultara ganador, 7.5 kgs. van para tí, corazón.

Las galletas que os presento son deliciosas, de textura abizcochada y un impresionante aroma y sabor a limón. Abstenerse los que ponen "bocachocho" cuando muerden un limón, porque no están hechas para ellos.

INGREDIENTES:

260 grs. de harina de reposteria.
75 grs, de mantequilla a temperatura ambiente.
1/2 cucharadita de bicarbonato.
1/2 cucharadita de levadura en polvo.
1 pellizo de sal.
170 grs. de azúcar.
1 huevo.
2 cucharadas de ralladura de limón.
2 cucharadas soperas de zumo de limón.
1 chorrito de esencia de vainilla.
Azúcar y ralladura de limón para rebozar.
PARA EL GLASEADO DE LIMÓN:

50 grs. de azúcar.
4 cucharadas soperas de zumo de limón.

PREPARACIÓN:

Batimos en un bol el azúcar y la mantequilla hasta que blanqueen hasta conseguir un mezcla esponjosa.
Añadimos el huevo, la ralladura de limón, el zumo de limón y la esencia de vainilla y volvemos a batir.
Incorporamos a cucharadas y poco a poco la harina previamente tamizada junto con la levadura y la sal hasta que los ingredientes estén totalmente integrados procurando que la masa no quede muy pegajosa. Si es así, añadir un pelín más de harina.
Tapamos con film y dejamos reposar en el frigorífico una media hora.
Pasado el tiempo, vamos cogiendo porciones de masa, rebozándolas en la mezcla de azúcar y ralladura de limón y disponiéndolas en una bandeja de horno forrada con papel vegetal, aplanándolas un pelín con la palma de la mano.
Las introducimos en el horno precalentado a 180º durante unos 12 minutos aproximadamente o hasta que empiecen a dorarse por los bordes. Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Mientras tanto vamos preparando el glaseado y para ello llevamos a ebullición el azúcar y el limón y vamos removiendo hasta que espese.
Pintamos las galletas con el glaseado y dejamos enfriar.

MEMBRILLO "ROCHER" CON ARENA DE NUECES

EMPANADILLAS DE MEMBRILLO

TORTILLITAS DE BACALAO Y "PEAZO" DE PREMIO

"VISITANDINES" DE ALMENDRA AMARGA

MAGRO CON TOMATE

TARTA GLASEADA DE CHOCOLATE

NUTELLA'S ESTONIAN KRINGLE

BOMBONES DE SAL

KRINGLE CON CREMA DE TURRÓN Y ALMENDRA CROCANTI

POLLO ASADO EN HTC (HORNO TURBO CONVECCIÓN)

GALLETAS DE AZÚCAR, CANELA Y CLAVO.

TORTA MORUNA

TARTA DE JAMÓN Y QUESO

POLLO CON SALSA DE SOJA Y CHARDONNAY (SOMONTANO)

BIZCOCHO DE YOGURT EN OLLA GM (COCIMIX DE LUXE)

PATATAS "CASA ESTEBAN"

CAKE POPS

TARTALETAS DE TORTILLA CON BACON Y QUESO

PANECILLOS ÁCIMOS PARA SAN VALENTIN

BOCADITOS DE LIMÓN